Las caries son una de las patologías de la boca más comunes. Es frecuente que todas las personas las padezcan en algún momento de su vida. Aunque el País Vasco es una de las comunidades autónomas más concienciadas con la salud bucodental y con el menor índice de caries (no hay que olvidar que lleva 25 años incorporando fluoración en las aguas de consumo), no hay que descuidarse. Es por eso que, a continuación, encontrarás los 10 mejores consejos sobre cómo prevenir las caries y poseer una excelente salud bucodental.
Antes de saber cómo prevenir las caries es importante comprender qué es una caries. Se trata de una enfermedad infecciosa que daña permanentemente los dientes. Las caries aparecen por diversos motivos. Entre los factores de riesgo de salud bucodental destacan:
Inmediatamente después de la ingesta, las bacterias de la placa dental comienzan a generar unos ácidos capaces de dañar los dientes. Si no nos cepillamos los dientes adecuadamente y a tiempo, estos microorganismos pueden provocar pequeños orificios en el esmalte.
La primera señal que nos avisa de la aparición de una caries es una mancha blanca en el diente. Esta se va tornando oscura conforme pasa el tiempo. Por desgracia, las caries no siempre son visibles y a veces no es posible identificarlas a simple vista. De ahí la importancia de acudir al dentista para realizar una revisión rutinaria.
Las caries comienzan erosionando el esmalte dental. Si progresan afectan al tejido del diente que hay bajo el esmalte, la dentina, pudiendo llegar hasta el nervio. Podemos hablar de tres tipos de caries en función de su ubicación:
Ahora bien, ¿cómo prevenir las caries? ¿Hay algún truco para lograr que nuestra boca esté sana? Efectivamente, si se siguen ciertas pautas en el cuidado de la boca podemos evitar su aparición.
Se aconseja el cepillado de los dientes tras cada comida durante al menos 3 minutos e insistiendo en las zonas donde aparecen las caries. Como los espacios interdentales, en el margen de los dientes y las encías, en las fisuras, etc.
Es vital complementar la higiene bucal con otras rutinas de higiene personal, como la utilización de irrigadores bucales y seda dental, los cuales nos ayudarán a conseguir una limpieza óptima.
Es conveniente solicitar consejo a nuestro dentista porque hay algunos enjuagues bucales que tiñen los dientes y afectan al esmalte. Aplicar un buen colutorio nos ayuda a limpiar la boca y a mantenerla hidratada controlando, así, los niveles de pH de la saliva.
Los dentífricos que tienen flúor son de gran ayuda para tratar de evitar las caries. Este componente detiene las roturas del esmalte y acelera la remineralización.
Los expertos recomiendan cambiar de cepillo de dientes cada tres meses para evitar que se acumulen las bacterias. Deberemos hacerlo antes si está deteriorado.
De esta manera controlaremos el pH de la boca evitando que disminuya o aumente. Para una correcta hidratación lo adecuado es beber, como mínimo, 2,5 litros de agua al día. Además, si nos acostumbramos a beber tras las comidas, ayudaremos a eliminar las partículas de glucosa que se adhieren a los dientes. Este truco es perfecto sobre todo cuando no tenemos la posibilidad de lavarnos los dientes.
Lo que implica reducir el consumo de hidratos de carbono, sobre todo de azúcares, y aumentar la ingesta de frutas, verduras, legumbres, carne y pescado. Los pigmentos naturales de las verduras y de la fruta, junto con la vitamina C, previenen la formación de placa dental. Los kiwis o los cítricos son alimentos ricos en vitamina C.
Eliminar el consumo de alcohol y tabaco no solo protege a nuestro organismo. Nuestra salud bucal también se beneficiará de ello, pues su consumo puede provocar la pérdida del esmalte del diente, sensación de sequedad en la boca, atrofia epitelial de la mucosa bucal y, evidentemente, caries.
Los chicles sin azúcar que contienen xilitol, un edulcorante sin azúcar extraído del árbol de abedul, son una excelente opción para limpiarse los dientes incluso cuando piquemos entre horas. De hecho, este polialcohol, destaca por sus propiedades neutralizadoras contra la acidez, reparando así el esmaltado de los dientes.
Para tener una buena salud bucodental es importante que un profesional vigile nuestra boca. Lo más aconsejable es visitar al odontólogo una vez al año para una revisión rutinaria y hacerse una o dos limpiezas bucales anuales, dependiendo del nivel de sarro que cada uno acumule.
Como ves, existen muchos trucos con los que prevenir la aparición de caries. Es conveniente prestar especial atención a la higiene bucal de los más pequeños. Si aplicamos unas correctas normas desde la infancia les resultará más fácil mantenerlas el resto de su vida. Si quieres saber más, consulta el artículo sobre cómo prevenir caries en la infancia.
Si sigues estas recomendaciones para evitar las caries, tu boca estará más sana. No olvides que un cepillado correcto y una alimentación sana y equilibrada, son los pilares para conseguir una sonrisa perfecta. Igualmente, recuerda que hacer un seguimiento dental adecuado te evitará problemas mayores. En IMQ ponemos a tu disposición el seguro dental IMQ para que luzcas una sonrisa sana y perfecta para siempre.