Especialista en Medicina General de IMQ
El potasio es un metal necesario para el funcionamiento del organismo. No podemos vivir sin él. Se absorbe en el intestino delgado procedente fundamentalmente de las hortalizas (brócoli, remolacha, coliflor), las judías, las frutas con hueso o pepitas (cereza, ciruela, melocotón) y de los plátanos; y se elimina por la orina (el 80%), las heces (el 10-15%) y el sudor.
En el organismo ejerce funciones vitales: interviene en el correcto mantenimiento de la hidratación actuando en el equilibrio osmótico y la regulación del pH corporal; está involucrado en la contracción muscular y la actividad neuromuscular; y promueve el correcto desarrollo de las células musculares, lo que le convierte en piedra angular del desarrollo orgánico.
Es de tal importancia su correcta regulación que el organismo cuenta con un sistema (el eje renina-angiotensina-aldosterona) dedicado en exclusiva a mantener óptimos sus niveles. Es esencial que éstos estén comprendidos entre los 3.5 y 5.5 milequivalentes por litro (mEq./ l.) en suero. Si el valor es menor a 3.5 mEq/l. hablamos de hipopotasemia; y si es superior a 5.5 mEq/l. se denomina hiperpotasemia.
Hipopotasemia
Pueden ser leves (entre 3 y 3.5 mEq.), moderadas (de 2.5 a 3 mEq.) y graves (menores de 2.5 mEq.). Aunque existen diversas causas, las más frecuentes son la toma de diuréticos excretores de potasio y las pérdidas extrarrenales como en diarreas masivas, la presencia de fístulas, etc., o en casos de excesiva sudoración o en grandes quemados. Otro motivo no tan frecuente pero sí importante es la alteración del eje renina/angiotensina por ciertos medicamentos para la tensión arterial.
Si la hipopotasemia es moderada puede no dar síntomas, mientras que en otras ocasiones pueden aparecer problemas cardíacos, musculares, digestivos, renales y endocrino-metabólicos. Por eso, el tratamiento se debe dirigir a tratar la causa y compensar el déficit.
Hiperpotasemia
Se produce cuando hay cifras superiores a 5,5 mEq/l. y, frecuentemente, en pacientes de edad avanzada con enfermedades sobreañadidas: insuficiencia renal tratados con antihipertensivos o cardíacos, y otros fármacos junto con diuréticos ahorradores de potasio, antiinflamatorios, antidiabéticos, etc. Su gravedad se clasifica en función de las alteraciones detectadas en el electrocardiograma porque puede provocar arritmias fatales. Las manifestaciones clínicas son trastornos de la conducción cardíaca y de la función neuromuscular, y la debilidad muscular, a veces extrema.
El tratamiento pasa por reducir o suspender los fármacos antihipertensivos o diuréticos e incluir los quelantes del potasio, que reducen la absorción de los alimentos cuando los ingerimos, como el bicarbonato sódico en caso de acidosis o diálisis si la función renal se está deteriorando.