Especialista en Odontología en las Clínicas Dentales IMQ Areeta e IMQ Algorta
Mantener una correcta higiene dental resulta fundamental para tener una buena salud bucal y prevenir problemas futuros como caries o enfermedades periodontales. Sin embargo, a veces tenemos creencias erróneas sobre cómo debemos cuidar correctamente los dientes y encías, lo que puede suponer un riesgo. Entre los 7 mitos más comunes figuran los siguientes:
1: Los cepillos duros son mejores
Los cepillos con cerdas duras pueden dañar el esmalte y las encías. Lo recomendable es usar un cepillo de dientes de dureza media y realizar movimientos circulares suaves para proteger tanto los dientes como las encías.
2: El chicle de menta sustituye al cepillado
Aunque el chicle de menta puede refrescar el aliento y estimular la producción de saliva, no reemplaza el cepillado y el uso de hilo dental. Estos son esenciales para una óptima higiene bucal, ya que el chicle no elimina la placa bacteriana. Además, el uso continuado de chicle puede generar problemas de la articulación temporomandibular.
3: El blanqueamiento dental daña el esmalte
El blanqueamiento dental, cuando se realiza bajo supervisión profesional, es un procedimiento seguro y eficaz que mejora la estética de nuestra sonrisa. Existe un mito extendido de que este proceso daña el esmalte dental, pero es un tratamiento controlado que, cuando se aplica correctamente, no causa daño al esmalte. Sólo elimina los radicales oxidados de la superficie dentaria utilizando agentes blanqueadores.
4: Usar hilo dental no es importante
El hilo dental juega un papel crucial en la salud bucal. Aunque el cepillado limpia la superficie de los dientes, el hilo dental es necesario para limpiar áreas difíciles de alcanzar, evitando así la acumulación de placa y el riesgo de caries. Se puede acompañar del uso de cepillos interdentales para aquellas zonas donde el hilo puede ser insuficiente por tener más espacio entre dientes.
5: Solo el azúcar causa caries
Si bien es cierto que el azúcar es un factor principal en la formación de caries, no es el único culpable. Además del azúcar, alimentos con alto contenido de almidones y ácidos también pueden contribuir significativamente al desarrollo de caries. Estos alimentos pueden adherirse a los dientes y, si no se eliminan adecuadamente, favorecen la formación de ácidos por parte de las bacterias en la boca, lo que a su vez puede dañar el esmalte dental.
Es indispensable entender que la caries dental es el resultado de un proceso que involucra varios factores. La caries se forma cuando los restos de comida en los dientes son descompuestos por bacterias y convertidos en ácidos, atacando el esmalte. Este proceso se ve acelerado por alimentos ricos en azúcares y almidones, pero también influyen factores como una higiene bucal inadecuada, la falta de fluoruro y ciertas condiciones médicas.
Para prevenir la aparición de caries, es fundamental mantener una dieta equilibrada, reduciendo el consumo de alimentos y bebidas azucaradas o ácidas, y practicando una buena limpieza dental, que incluya cepillado regular, uso de hilo dental y visitas periódicas al dentista.
6: Embarazo y pérdida de dientes
Las alteraciones hormonales durante el embarazo aumentan el riesgo de gingivitis y caries. Es crucial en el embarazo intensificar la higiene dental y visitar al dentista para prevenir problemas mayores.
7: Los Brackets son solo para niños
Los brackets son una solución de ortodoncia efectiva para cualquier edad, no solo para niños. Existen opciones más discretas y cómodas como la ortodoncia invisible o brackets cerámicos.