Te despiertas con ella, la tarareas en la ducha, te acompaña en los largos y en los cortos viajes en coche, la bailamos, la cantamos, la disfrutamos… y es que un día sin música es como un día sin sol. Nos acompaña allá donde vayamos a lo largo de nuestra vida. Escuchar música es un verdadero placer y, en ocasiones, una auténtica necesidad.
Escuchar música es una de las pocas actividades que implican el uso completo del cerebro. Y por eso, además de hacer vibrar los tímpanos, es positiva para nuestra salud y nuestro bienestar. Tiene beneficios tanto mental como físicamente para las personas, influye en el humor, en las capacidades cognitivas, en la creatividad, en las enfermedades… ayuda a la liberación de dopamina y endorfina en nuestro cerebro, por lo que nos ayuda a sentir placer y felicidad.
Así, cada vez más, se usan técnicas que implican la música para tratar y conseguir el bienestar completo.
La mayoría de nosotros no nos damos cuenta de lo mucho que nos afectan los sonidos de nuestro entorno, sin embargo, muchas veces buscamos, sin quererlo, el tipo de música que necesitamos en cada momento para experimentar una sensación concreta. De hecho, algunos creamos listas de canciones con diferentes estilos.
Para encontrar la calma, la música relajante nos proporciona un maravilloso equilibrio interior ya que tenemos un aporte de serotonina que ayuda a aliviar el estrés, calmar molestias físicas, tensiones y preocupaciones ya que actúa como analgésico. Es una invitación directa al bienestar.
El estrés también es la causa del 60% de las enfermedades que sufrimos los seres humanos, por lo que si nos relajamos mejoraremos considerablemente nuestro sistema inmunológico.
Se ha demostrado que reduce la artrosis y la artritis reumatoide hasta en un 21% y la depresión hasta un 25%. También ayuda a combatir la cefalea crónica y reducir la intensidad, frecuencia y duración de los dolores de cabeza.
La música tiene un enlace a nuestras emociones por lo que puede ser una herramienta muy eficaz que te ayude a sentirte mejor. Al escuchar música de relajación, se crea una zona de paz que nos permitirá disfrutar de cada día.
En IMQ somos conscientes de los beneficios de la música y por ello hemos dado un paso más apostando por la musicoterapia, que es la utilización de la música y de sus elementos para conseguir objetivos terapéuticos, llevada a cabo por una musicoterapeuta cualificada y todo ello en un contexto terapéutico. En las sesiones de musicoterapia se promueve la expresión emocional dando sentido a las experiencias personales por medio de la música en vivo desde la improvisación musical y de esta forma nos adaptamos a la situación y al ritmo de cada paciente.
Titulada en Música, enfermera y musicoterapeuta del Programa de Musicoterapia de Clínicas IMQ.