La falta de deseo sexual en la mujer se debe a diversas causas. Aunque es natural que existan ...
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La gonorrea es una infección de transmisión sexual (ITS) que afecta tanto a hombres como a mujeres. Según datos ofrecidos por el Departamento Vasco de Salud, después de varios años con una tendencia al alza, el número de contagios por gonococia en el País Vasco inició un descenso del 7 % a partir de 2020. Una consecuencia directa del confinamiento durante la pandemia.
Esto no significa que se pueda bajar la guardia, pues la aparición de infecciones de transmisión sexual deja la puerta abierta a otras enfermedades más graves de la misma índole, como el VIH. Por este motivo, queremos explicarte qué es la gonorrea, cuáles son sus síntomas y qué tratamiento se debe seguir.
La gonorrea es una de las ITS más comunes y afecta tanto a hombres como a mujeres desde el momento en el que se inician las relaciones sexuales. Esta infección es frecuente entre los 15 y los 24 años y se contagia a través de relaciones sexuales de tipo oral, anal y vaginal con una persona infectada.
El gonococo es el causante de su aparición. Pero ¿qué es el gonococo? Es una bacteria de forma oval que causa la gonococia o gonorrea. Su nombre técnico es Neisseria gonorrhoeae. Suele provocar problemas en la garganta, en la uretra y en el recto. En las mujeres, además, llega a afectar al cuello de la matriz.
El uso de preservativo en las relaciones sexuales es el método de prevención más eficaz para evitar sufrir esta enfermedad de transmisión sexual en hombres y mujeres.
Para conocer más profundamente la gonorrea, es importante prestar atención a sus síntomas y tratamientos.
Hay ocasiones en las que la gonorrea no provoca síntomas, pero, cuando lo hace, estos se presentan en menos de dos semanas y con ciertas diferencias según el sexo. Los más frecuentes se manifiestan en el aparato genital:
Además del aparato genital, la gonorrea puede afectar a otras zonas en función de las prácticas sexuales:
En el 3 % de los casos, la gonorrea puede extenderse por todo el organismo. Si esto sucede, el paciente presentará fiebre, dolor en las articulaciones, lesiones en la piel o malestar general. Con menos frecuencia se desarrolla hepatitis o meningitis.
La gonorrea se cura con el tiempo y con el tratamiento adecuado. Si no hay complicaciones se trata con antibióticos del grupo de las cefalosporinas. En caso de que el paciente tenga alergia a este grupo, se pueden recetar otros diferentes. En cuanto a la duración del tratamiento y las dosis necesarias, estas varían en función de su localización. Se pueden administrar por vía oral o intramuscular.
Es importante tener en cuenta que, aunque tu pareja no presente síntomas, deberá someterse al mismo tratamiento que tú. En caso de no hacerlo puede contagiarse con el tiempo, aunque tú ya te hayas curado. Y en caso de embarazo y de que el bebe desarrollé también la infección, deberá ser tratado con antibiótico
La alta tasa de contagios a causa de la gonorrea ha hecho que esta ITS se convierta en una de las infecciones de transmisión sexual más graves y con mayor índice de contagio en la sociedad actual.
El aumento de parejas sexuales y el desconocimiento de si estas practican o han practicado sexo con otras personas sin usar protección es el principal factor de riesgo. De ahí que sea tan importante mantener una relación fluida y de confianza con nuestras parejas sexuales.
Las consecuencias de la gonorrea pueden ser muy peligrosas tanto para mujeres como para hombres. En el caso de mujeres embarazadas, si la madre padece gonorrea, puede llegar a sufrir un aborto o un parto prematuro. Realizar visitas regulares al ginecólogo será clave para actuar a tiempo y seguir el tratamiento adecuado ante su posible aparición.
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