La permanente sobreexposición a las pantallas que padecemos en nuestra vida cotidiana constituye ...
La dermatitis seborreica en niños recién nacidos es una afección muy común que aparece durante las primeras semanas de vida. También llamada costra láctea, es una erupción en forma de placas escamosas o aceitosas que salen en la cabeza del bebé. Si aparece, no debe preocuparte puesto que no es grave y normalmente desaparece al cabo de unas semanas. Aún así, hay algunas cosas que puedes hacer para ayudar a eliminarla.
¿Qué es la dermatitis seborreica infantil y por qué aparece?
Es una afección que surge frecuentemente entre las dos primeras semanas y los tres meses de vida. La dermatitis seborreica infantil consiste en unas manchas rojizas de formas irregulares cubiertas por escamas o costras. Esta erupción aparece normalmente en el cuero cabelludo, aunque puede salir también en otras zonas de la cabeza, y las escamas tienen un color blanco o amarillento. No es infecciosa y no causa ningún malestar al bebé, ni dolor ni picazón.
La costra láctea aparece por el aumento de secreción de las glándulas sebáceas y, aunque las causas no están del todo determinadas, puede estar relacionada con un aumento de hormonas, que pasan de la madre al bebé antes de nacer. Este aumento de hormonas provoca un exceso de aceite en la piel del recién nacido, haciendo que aparezcan las placas escamosas. También puede tener relación con un mayor crecimiento de algunos tipos de hongo presentes en el sebo del bebé, aunque debemos tener en cuenta que no se debe en absoluto a una mala higiene, sino a un proceso natural y en ningún caso es contagiosa.
Cómo ayudar a eliminar la erupción
La dermatitis seborreica habitualmente no requiere de ningún tratamiento médico, ya que va desapareciendo por sí sola al cabo de unas semanas, pero puedes poner en práctica algunos consejos para contribuir a que se reduzca:
- Lava su cabello con champú suave para bebés una vez al día.
- Antes de enjuagarle la cabeza, frota suavemente el cuero cabelludo con un cepillo de cerdas suaves o con los dedos, de esta forma se irán soltando poco a poco las escamas.
- No rasques nunca las costras puesto que la piel podría irritarse.
- No utilices champús antiseborreicos ni productos con cortisona sin consultar previamente al pediatra. Algunas cremas o champús contienen elementos que podrían ser tóxicos al ser absorbidos por la piel del bebé.
- Cuando las costras hayan desaparecido, es recomendable seguir lavando el cabello de tu bebé con un champú suave cada dos o tres días durante las siguientes semanas para evitar que las escamas se acumulen.
Cuándo debes consultar al pediatra
Si las costras se extienden a otras partes del cuerpo del bebé o si no desaparecen al cabo de unas cuatro semanas, es aconsejable consultar al médico para que te recomiende el mejor tratamiento a seguir. Es posible que te recete una crema con pequeñas dosis de cortisona específica para bebés que ayudará a eliminar la erupción.
El pediatra también podrá examinar a tu recién nacido para descartar otras afecciones cutáneas como la dermatitis atópica, que se diferencia de la dermatitis seborreica sobre todo porque provoca un picor importante.
En todo caso, si durante las primeras semanas aparecen estas costras o placas escamosas en el cuero cabelludo de tu bebé, no debes preocuparte. Es una afección muy típica de los recién nacidos que no le provoca ningún malestar, en la mayor parte de los casos desaparece por sí sola y solo es necesario que utilices un champú suave para bebés para ayudar a reducirla.
Jesús Rodríguez Ortiz
Pediatra de IMQ
