¿Se te duermen las manos al dormir? ¿Has notado que te cuesta abrir los botes de comida? ¿Notas calambres que van hacia los dedos pulgar, índice y medio? Si es así, has tenido uno de los tantos síntomas que acompañan el síndrome del túnel carpiano. El síndrome del túnel carpiano es una neuropatía focal del nervio mediano en la base de la mano. Para entender un poquito más de esta afección vamos a hacer un repaso de nuestra anatomía. El nervio periférico es una estructura blanda que se puede asemejar a un cable y que lleva la información a través de electricidad. Está recubierto por una vaina de mielina que le ayuda a transmitir el impulso nervioso con rapidez.
El túnel carpiano no es más que un pasadizo en la base de la mano por donde discurren varios tendones que flexionan los dedos y el nervio mediano. Cuando por diferentes motivos ocurre un estrechamiento de este pasadizo, el nervio mediano sufre una compresión por parte de los tendones que le rodean. Esta compresión se manifiesta con síntomas como adormecimiento, pérdida de fuerza, calambres y dolor en la mano y muñeca.
Esta enfermedad es muy frecuente en personas que trabajan en el área de la construcción, estilismo, peluquería, cocineros, o personas que utilizan el teclado por muchas horas. También es posible sufrirlo sin haber practicado estas actividades, en personas con tendencia a la artritis. Las mujeres embarazadas por el edema en las extremidades suelen padecer este trastorno en el tercer trimestre del embarazo, y por ser la causa un evento puntual (el embarazo) suele remitir al finalizar el mismo.
Diagnóstico y tratamiento del túnel carpiano
El diagnóstico de la neuropatía del nervio mediano se realiza a través de un estudio neurofisiológico llamado electroneurografía. El nervio periférico que se asemeja funcionalmente a un cable, se estudia aplicando pequeñas descargas eléctricas y valorando parámetros físicos como amplitud, duración y velocidad de conducción para definir como es su funcionamiento, si es óptimo o está afectado y el grado de severidad en caso de estar afectado.
El tratamiento del túnel carpiano va desde terapias muy sencillas como la colocación de una férula de descarga en la mano (una especie de muñequera) hasta una cirugía muy sencilla en donde se abre el túnel para disminuir la presión dentro de él y liberar al nervio mediano. El tipo de tratamiento depende de la severidad de la afectación del nervio mediano, siendo todos, en la mayoría de los casos bastante efectivos.
Dra. Patricia Colmenarez
Neurofisióloga del Centro IMQ Barakaldo