¿Cuántas calorías tiene un helado?

El helado se asocia en muchas ocasiones al verano, al buen tiempo, a las vacaciones… A una época en la que se descuida la alimentación bajo el pretexto de estar de vacaciones y que trae consigo no sólo una subida de peso considerable sino unos malos hábitos difíciles de erradicar a posteriori.

El helado no puede considerarse un alimento saludable. Los alimentos saludables son aquellos que podemos tomar muy a menudo y no tienen una repercusión negativa en la salud. Pero comerse un helado, en estas fechas y de forma esporádica, para saborear el verano, es asumible. De modo que, si lo vamos a hacer, hagámoslo bien.

Tipos de helados

Empecemos por analizar los diferentes tipos de helados:

Helados elaborados en casa:

Dependiendo de los ingredientes que se utilicen en su elaboración pueden ser saludables o no. Un helado casero lleno de azúcar no puede serlo. El resto de ingredientes no suelen ser perjudiciales. Somos nosotros quienes decidimos los ingredientes y si hacerlos o no con heladera (es más sencillo con, pero existen diferentes recetas para hacerlos sin ella). Para su elaboración se suele utilizar habitualmente una base de plátano (tiene la textura y el dulzor adecuado y un sabor más o menos neutro) a la que se le añade el resto de frutas o ingredientes (cacao, frutos secos…) aunque últimamente se está utilizando mucho el aguacate. Sobretodo, en el caso de los veganos y debido a sus grasas saludables. En todo caso, ambos, consiguen la textura del helado deseada. Otros dos ingredientes que se utilizan mucho en estas elaboraciones son la miel y el sirope de agave. Su textura líquida es más adecuada para conseguir una mejor cohesión de los ingredientes.

Helados artesanos auténticos

Normalmente se trata de establecimientos que abren en verano y cierran en invierno. Se trata de helados elaborados con pocos ingredientes y naturales, normalmente, además, de temporada. Y es que una de las ventajas del verano es que hay mucha variedad de fruta con lo que se nos abre la posibilidad de encontrar helados artesanos de múltiples sabores. Dentro de este grupo existen a su vez dos variedades:

• Los que están elaborados con leche o nata a los que se añaden otros ingredientes naturales como huevo, avellana, cacao…
• Y los sorbetes que suelen llevar únicamente fruta de temporada (o congelada), agua y azúcar

Helados falsos artesanos

A pesar de que en todas las heladerías pone que sus helados son artesanos porque se elaboran donde los están vendiendo, estos últimos no utilizan ingredientes naturales y frescos sino que para hacerlos mezclan una base con una pasta o polvos para dar el sabor deseado en una heladera y así consiguen el “helado” por lo que no se trata de productos naturales.

Helados industriales

Son aquellos helados que se compran en cualquier parte (quiosco, tiendas de chuches, supermercados…). Su composición nutricional es igual de perjudicial que la de los falsos artesanos ya que contienen el mismo tipo de grasas, colorantes, espesantes y  con procesos industriales más elaborados y con más handicup.

Llevan más parafernalia y al estar elaborados fuera del establecimiento requieren de un traslado en un camión refrigerado con lo que al consumo energético para elaborarlo y mantenerlo en su traslado se le une el combustible (y el envoltorio, que a diferencia de la mayoría de las tarrinas, no es biodegradable). Es un helado que además de perjudicar la salud también daña el medio ambiente.

Helados veganos y sin azúcar

Un helado vegano no tiene por qué ser saludable. Dentro de esta categoría podemos encontrar helados hechos con leches vegetales como de sorbetes.

Helados sin azúcar que suelen utilizar edulcorantes acalóricos

Estos pueden ser más apropiados para personas diabéticas. Eso sí, si el objetivo es no coger peso, no merece la pena; mejor un artesano.

Helados sin lactosa

Una buena alternativa para las personas que sufren intolerancia a la lactosa, son los sorbetes y los helados veganos.

Cómo diferenciar los helados artesanos de los falsos artesanos

Hay varias pistas que pueden ayudarnos a la hora de diferenciarlos:

• Los falsos artesanos suelen estar dispuestos en forma de montaña y adornados con algún ingrediente como una galletita, chuche, o frutita en su cubetas.
• Los colores demasiado intensos también son una señal de que estamos ante falsos artesanos (y si son azules, ya no hay duda…). Un helado de fresa no es de color rosa intenso a no ser que sea falso.
• Que haya demasiada variedad tampoco suele ser buena señal.
• A la hora de probarlos, la textura de los falsos suele ser más cremosa, son más blanditos, de sabor más dulce e intenso y suelen generar más sed debido a la cantidad de azúcar y grasas no saludables que contienen.
• El helado artesano se derrite más debido a que difiere mucho en su contenido en grasas, azúcares y carece de aditivos. Las Cubetas, a su vez, se van vaciando según se van consumiendo y no están siempre llenas como la de los falsos artesanos. Los artesanos se hacen prácticamente a diario y se van reponiendo en la medida de lo posible.
• Que ponga que los helados son italianos o que el nombre de la heladería lo sugiera, y que ponga alguna fecha –fundada desde…, haciendo helados artesanos desde…-.

• Helado de crema: entre 144 y 230 calorías (los caseros entre 70 y 100 calorías)
• Yogur helado: 140 calorías (cuantos más toppings más calorías)
• Polos: de 80 a 90 calorías