Cómo protegerte de la sobreinformación y los bulos sobre el coronavirus

Las noticias en torno a la COVID-19 inundan estos días los telediarios, los periódicos y también las redes sociales. Es un tema omnipresente que, además, ha generado multitud de bulos, algunos de ellos muy perjudiciales. La sobreinformación y las noticias falsas pueden generar un impacto psicológico, puesto que nos producen angustia, sensación de incertidumbre o preocupación sobre nuestra salud y la salud de los demás. Algunas consecuencias pueden ser síntomas de estrés, ansiedad y problemas para conciliar el sueño. Por eso es importante tener algunas herramientas para protegernos.

Por qué circulan tantos bulos sobre el coronavirus

Las noticias falsas no son algo nuevo, pero con las redes sociales se han extendido y todos hemos recibido por canales como WhatsApp, Twitter, Instagram o Facebook informaciones que han resultado no ser ciertas. Los bulos corren mucho más rápido que las noticias contrastadas, y eso ocurre porque son contenidos más sensacionalistas o polémicos que atacan directamente a nuestros miedos y atraen nuestra atención. Aquello que apela a nuestras emociones y no a la razón es siempre más atractivo, por eso debemos ser especialmente cautos.

Es importante tener en cuenta que este tipo de informaciones conllevan muchos peligros, sobre todo aquellas que tienen que ver con la salud, como los falsos remedios frente al coronavirus que no solo son inútiles, sino que pueden tener consecuencias dañinas. Tal y como destaca la OMS, la lucha contra la desinformación es una parte vital de la batalla contra el virus.

Filtra la información que te llega

En las redes sociales a veces resulta difícil diferenciar entre las noticias reales y las falsas, pero hay maneras de detectar cuándo estamos delante de un bulo. Lo más importante es usar el pensamiento crítico, no caer en los mensajes alarmistas y no compartir informaciones que no sabemos de dónde han salido, puesto que así contribuiremos a pararlas. Estas son algunas de las claves:

• Comprueba siempre la fuente de donde sale la información.
• Infórmate solo a través de fuentes fiables.
• Si es una noticia polémica, desconfía y busca en otros medios.
• No la compartas si no sabes de dónde proviene.
• En cuestiones de salud, fíate solo de lo que dicen los organismos oficiales.

Pon freno a la sobreinformación

Estar informados es positivo, pero hasta cierto punto. A través de Internet podemos acceder a mucha información que nos llega por multitud de canales y estar todo el día conectados leyendo mensajes en torno a la pandemia puede generarnos altos grados de ansiedad y preocupación. Para evitarlo, es recomendable establecer solo unos momentos al día para informarnos sobre la actualidad, por ejemplo, por la mañana mientras desayunamos o al final de la jornada, limitando pensar en el tema el resto del día y enfocarnos, así, en nuestras tareas habituales.

A la hora de informarnos, es mejor huir de los mensajes alarmistas y centrarnos solo en la información que nos ofrecen personas expertas y organismos de salud. Las noticias alarmistas influyen en nuestro estado de ánimo, nos pueden confundir acerca de lo que esperamos que ocurra, sustituyendo nuestros pensamientos propios sobre el futuro por predicciones negativas, de futuro incierto.

Desconecta y usa técnicas de relajación

La sobreexposición a noticias sobre la pandemia puede producir efectos psicológicos como estrés, fatiga, irritabilidad, insomnio, síntomas obsesivos o hipocondríacos, por ejemplo. Cada persona lleva la situación de una forma diferente, pero la incertidumbre puede generar altos grados de preocupación y angustia en relación al futuro. Por ello, es muy importante protegernos y no dejarnos llevar por el pesimismo. Para evitar el impacto en nuestro estado de ánimo que puede producir la sobreinformación, pon en práctica algunas claves:

• Infórmate solo en momentos puntuales del día.
• Si sientes angustia, establecer unas rutinas diarias pueden ayudarte a rebajar la preocupación y la incertidumbre.
• Hacer ejercicio todos los días, como pasear, puede tranquilizarte.
• Deja un tiempo al día para disfrutar
• Y lo más importante, habla con tus amigos y tus seres queridos acerca de cómo te sientes.

Si tienes cualquier duda relacionada con la salud y las medidas frente a la pandemia, infórmate solo de fuentes fiables y oficiales, y recuerda que evitar la sobreexposición a las noticias alarmistas y no dar crédito a los bulos es una forma de cuidar tu salud mental.

Andoni Sánchez
Psicólogo de IMQ Amsa