En el tratamiento de enfermedades cardiovasculares se aplican intervenciones terapéuticas novedosas con resultados prometedores. Es el caso, por ejemplo, de la fibrilación auricular, la arritmia cardiaca más habitual.
Las enfermedades relacionadas con la fibrilación auricular son elevadas a partir de los 40 años, en concreto del 4,4%. Similar en hombres y mujeres, se incrementa escalonadamente a partir de los 60, llegando al 10-15% de las personas mayores de 80 años. Los pacientes con fibrilación auricular se estiman en más de 50.000 en el País Vasco, muchos de ellos sin diagnosticar.
El tratamiento más efectivo para esta enfermedad cardiovascular, siempre que no haya contraindicaciones, es el aislamiento eléctrico de las venas pulmonares. Aunque hay diferentes técnicas para lograrlo, la crioablación con balón es la más novedosa y sencilla. Se realiza un cateterismo cardiaco colocando un balón o globo dentro de cada una de las venas pulmonares y congelando con óxido nitroso su unión con la aurícula izquierda. Un procedimiento que no precisa anestesia general y con ingreso habitual de 24 horas. La mejoría alcanza el 70% con un solo procedimiento.
Tratamiento de enfermedades cardiovasculares: insuficiencia cardiaca
La insuficiencia cardiaca en un problema sanitario de primer orden. Los estudios en España arrojan una prevalencia del5% (unas 100.000 personas en el País Vasco). Es la primera causa de hospitalización en mayores de 65 años, con el 3% de todos los ingresos. El tratamiento habitual es farmacológico, pero en un tercio de los pacientes la asincronía cardiaca por bloqueo de la rama izquierda del sistema de conducción eléctrico es
un factor agravante, cuando no la causa primaria. A este grupo se le podría llegar a recomendar la resincronización cardiaca con un marcapasos específico que envía electrodos de estimulación a ambos ventrículos.
La mejora alcanza al 75% de los pacientes y en un 10% se llega a normalizar la función. El implante de este tipo de marcapasos es algo más complejo que el convencional pero se suele realizar sin anestesia general y con una estancia hospitalaria de 24 a 48 horas.
Bloqueo eléctrico cardiaco
Si hablamos del tratamiento de enfermedades cardiovasculares, hemos de tomar en consideración las novedades en el uso de marcapasos. Se trata de un dispositivo que envía al corazón impulsos eléctricos para producir latidos cuando la electricidad propia del paciente es demasiado lenta o incluso ausente. En el País Vasco se implantan unos 1.800 al año, incluyendo también las sustituciones. Recientemente, se han aprobado marcapasos que no precisan electrodos y tienen un procedimiento de implante de mínima invasión, sin intervención quirúrgica ya que se introduce vía catéter a través de la vena femoral. Eso reduce el tiempo de ejecución, el riesgo de infecciones futuras y el desplazamiento o rotura de alguno de los cables. En el País Vasco ya se se implantan de forma rutinaria lo que supone un salto cualitativo en esta patología.
Dr. Jesús Martínez Alday
Especialista en Cardiología Clínica y Arritmias de IMQ