Los tumores cerebrales son poco frecuentes (representan el 2% de todos los tumores), pero conllevan una elevada mortalidad. Los primeros síntomas, que se intensifican de manera progresiva, son dolores inusuales de cabeza, debilidad en los miembros, falta de sensibilidad o dificultades para hablar, etc. En cuanto al diagnóstico, la resonancia magnética cerebral constituye una herramienta muy importante que permite un diagnóstico precoz y una aproximación más precisa al tipo de tumor de que se trata.
El tratamiento de los tumores cerebrales se basa en tres pilares fundamentales:
La extirpación quirúrgica
La cirugía puede curar determinados tumores si se extirpa totalmente la lesión, aunque esto no siempre es posible, sobre todo si afecta áreas vitales. El objetivo debe ser siempre conseguir eliminar el tumor sin provocar un déficit neurológico, que es la principal secuela que puede dejar la cirugía en el cerebro.
A pesar de la dificultad de trabajar en un área tan delicada, la mortalidad en este tipo de intervenciones es inferior al 2%. Por el contrario, cuando se lleva a cabo sin complicaciones produce un efecto beneficioso en la calidad de vida del paciente, al permitir la desaparición o la rápida mejoría de los síntomas. La implantación de la neuronavegación con resonancia ha supuesto un hito en la mejora técnica y en los resultados.
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Radioterapia y quimioterapia
Esta terapia es eficaz en múltiples tumores primarios y secundarios del sistema nervioso central. Se basa en la inducción de daño en el ADN y en los orgánulos de las células malignas, con lo que se consigue reducir la masa tumoral. Sin embargo, es necesario disminuir al máximo la zona sana tratada, pues causa también desmielinización, daño neuronal y cambios vasculares en el tejido normal. Las nuevas técnicas, como la radioterapia conformada 3D y la de intensidad modulada, consiguen ajustar mejor el área a irradiar, y la radiocirugía permite tratar de forma muy precisa volúmenes pequeños con mínima afectación del tejido circundante.
Por su parte, el papel de la quimioterapia ha cambiado en los últimos años y ha pasado de un uso limitado a ser el tratamiento de primera línea del glioblastoma, el tumor primario más frecuente. En la próxima década, se implantarán tratamientos antidiana quimioterápicos muy novedosos ajustados al conocimiento de la biología molecular de cada cáncer.
Tipos de tumores cerebrales
Los tumores cerebrales se dividen en:
- Primarios: Se originan directamente en el sistema nervioso.
- Secundarios: La extensión de otro cáncer genera metástasis en alguna parte del cerebro
Síntomas del tumor cerebral
Los principales síntomas del tumor cerebral son los siguientes:
- Dolor de cabeza: Más fuerte al despertar o al realizar algún esfuerzo.
- Falta de sensibilidad en algunas extremidades.
- Mareo o vértigo.
- Debilidad en una parte del cuerpo.
- Problemas de visión que generan dificultades para leer o escribir.
Incidencia de los tumores cerebrales
Estos tumores suponen un 2% de todos los cánceres diagnosticados. Dentro de los tumores cerebrales un 58% son malignos, un 35% benignos y un 7% presentan un comportamiento incierto. La supervivencia a a los 5 años en menores de 35 aquejados de un tumor cerebral maligno es del 60%. Por sexos afecta en un 56% de los casos a mujeres y en un 44% a hombres.
Especialista en Neurología de IMQ