Hinchazón abdominal: qué es y cómo evitarla

Última actualización: 19 de abril, 2023

3 min

Dra. Mª Mar Calvo
Especialista en Aparato Digestivo de IMQ

Ocio y bienestar | Prevención | Aparato digestivo

Sentir el vientre hinchado es una molestia que ocurre con frecuencia y que se debe a varias causas. La distensión suele ser pasajera y ser consecuencia de trastornos digestivos leves, razón por la que generalmente no es necesario consultar a un médico para resolverla. En este post te vamos a explicar qué es, cuáles son sus causas y qué tratamientos son los más adecuados.

¿En qué consiste la distensión abdominal?

Cuando el abdomen se dilata, sientes incomodidad, la ropa queda más ajustada y te molesta. Es posible que haya síntomas asociados, y puede deberse tanto a una dieta inadecuada como a la presencia de alguna enfermedad.

Exceso de gases

Los alimentos que suelen provocar exceso de gases en el intestino: las alcachofas, las legumbres, puerro, espinacas, acelgas, la coliflor, el brócoli,..es decir, los alimentos que llevan fibra que llamamos leñosa. Las bebidas carbonatadas y algunos edulcorantes, como el manitol y el sorbitol, también lo producen. Lo más común es que se elimine espontáneamente después de algunas horas.

La fibra es saludable para el organismo por muchas razones, como mantener la microbiota intestinal, regular el tránsito y reducir los niveles de colesterol en sangre. Sin embargo, aumentar de manera brusca su consumo no permite a las bacterias intestinales adaptarse a la modificación de la dieta, lo que genera acumulación de gases en el intestino y dolor abdominal.

El exceso de gas abdominal “patológico” puede deberse a varias causas.

Causas de la distensión abdominal

Si el gas es más a nivel gástrico suele deberse a lo que se llama aerofagia o tragar aire (proviene del griego aeros = aire, phagos =deglutir). La gente que hace aerofagia es sobre todo las personas que comen rápido, mascan chicle, beben bebidas gaseosas, fuman o gente más nerviosa.

Las personas que hacen aerofagia suelen encuadrarse en lo que se llama dispepsia tipo dismotilidad. La dispepsia es una alteración motora (de movimiento) del estómago que se asocia a déficit de relajación post-ingesta, sensación de plenitud precoz, nauseas, dolor gástrico post-ingesta, eruptos… es una entidad frecuente y se asocia a una alta frecuencia sobre todo relacionado con períodos de stress.

Si el gas es más bien periumbilical o por todo el abdomen suele deberse a lo que se llama síndrome de intestino irritable (SII). El SII es un trastorno que se basa en alteraciones de la motilidad o movilidad intestinal y alteraciones de la microbiota intestinal. Sus síntomas más frecuentes son la distensión abdominal, el exceso de ventosidades, dolores abdominales difusos…

El SII es un trastorno que se relaciona mucho con el stress, así como la dispepsia, porque es el cerebro el que regula, dirige, ordena la función del tubo digestivo y de ahí que se diga la mítica frase de: el tubo digestivo es el segundo cerebro del organismo. Hay que saber que el SII puede alterar mucho la calidad de vida del paciente pero NUNCA le va ocasionar un aumento de la mortalidad ni se relaciona con el cáncer colo-rectal.

El SII puede ir acompañado de diarrea, estreñimiento o simplemente aumento del gas abdominal (flatulencias). Es importante diferenciar el SII que se asocia a síntomas leves y saber que hay síntomas de alarma que deben hacernos consultar a profesionales de la salud como el sangrado rectal, pérdida de peso y apetito…

Sobrecrecimiento bacteriano de intestino delgado: en este cuadro médico hay una “migración” de la flora fermentadora habitual en el colon que migra al intestino delgado. En el colon, normalmente, va el contenido fecal porque los nutrientes ya han sido absorbidos previamente en el intestino delgado por lo que a dicho nivel la flora fermentadora no aporta tanto gas. Si hay flora de colon en intestino delgado, dicha flora fermenta todos los nutrientes que llegan de la cavidad gástrica y genera mucho gas. Esto se puede diagnosticar con la prueba de SIBO (en inglés “Small Intestine Bacterial Overgrowth).

Intolerancias a alimentos: existen muchas intolerancias a diferentes tipos de alimentos, pero las más comunes son las debidas al gluten (una proteína presente en muchos cereales), a la lactosa o azúcar de la leche, al sorbitol y a la fructosa. La ingesta de estas sustancias produce diarrea, náuseas, distensión abdominal y flatulencia.

Posibles tratamientos

La diversidad de estos trastornos es muy amplia y, en muchos casos, el apoyo de un nutricionista es esencial para controlar los síntomas con una alimentación más saludable. Además, existen algunas medidas con las que puedes contrarrestar muchas de las molestias:

Come despacio, sin hablar, masticando bien y en pocas cantidades.
Suprime las bebidas carbonatadas, los chicles y el uso de pajitas.
Evita el exceso de grasa en los alimentos, así como las especias.
Toma suficiente agua con las comidas.
Las infusiones de manzanilla, menta, jengibre, hinojo alivian la distensión causada por los gases.
Practica deporte, ya que contribuye a distribuir bien el gas abdominal y facilita y favorece un buen movimiento de tubo digestivo.
Evitar las situaciones de stres.

Mantener hábitos saludables y alimentarte con una dieta sana y equilibrada te ayudará a evitar el vientre hinchado. Suele ser una molestia pasajera, pero si persiste y hay síntomas asociados, lo más adecuado es que busques ayuda profesional.